El ser humano es solo una de las muchas especies que habitan la Tierra. Sin embargo, con nuestra actividad descontrolada, hemos puesto en riesgo a todos los que compartimos esta casa común. También a nosotros mismos. Hoy es más necesario que nunca que todos nos impliquemos en la protección del medio ambiente. Necesitamos cambiar nuestra relación con la naturaleza, basarla en el cuidado y en pequeños gestos como reciclar, proteger, reducir, reutilizar…acciones sencillas que nos ayudan a conservar el medio en beneficio de las generaciones presentes y futuras.
Desde el CAI Pasito a Paso nos iniciamos en el cuidado y la preservación del medio ambiente. En otras ocasiones os hemos hecho conocedores de nuestras prácticas de reciclaje o de nuestro huerto ecológico.
Esta vez vamos a concienciar sobre la importancia y el valor de las energías renovables. Conocemos aquellos elementos de la naturaleza que nos proporcionan energía: el sol, el viento y el agua. Pero, ¿cómo es posible obtener energía del viento? ¿Y del agua? ¡Vamos a descubrirlo! Recordemos que nuestra misión es fomentar el consumo sostenible y responsable. Para ello no hay mejor manera que utilizar de forma responsable los recursos naturales de los que disponemos.
Para poder iniciarnos en este mundo de las energías renovables, primero hemos de saber por qué son importantes y, una vez más, volvemos a recordar la situación actual de la Tierra y el peligro que corre.
Las seños crearon la decoración del espacio donde trabajaríamos y descubriríamos las energías renovables: elaboraron con cartón un grifo gigante del que cae agua a modo de cascada hasta un estanque. Para simular el agua utilizaron bolsas de plástico. Alrededor de la cascada se podía observar cómo estaban creciendo hojas de diferentes tipos gracias a la ayuda del agua.
Además, con cartón también hicieron unas manos que simulaban abrazar o sostener a la Tierra. La tierra estaba conectada a las manos con hilo de pescar. De esta manera, era capaz de girar sobre sí misma. Por un reverso, la Tierra estaba contenta; por el otro, la Tierra se encontraba triste.
Una vez estuvo preparado nuestro rincón nos pusimos manos a la obra a aprender, explorar, descubrir…qué era aquello que las seños decían de que el agua podía mover cosas o de que el sol nos daba luz y calor. Parecían estar locas hasta que empezamos a ser conocedores de todo lo que nos habían contado.
Realizaron varias actividades para los niños y niñas dependiendo del elemento de la naturaleza que iban conociendo. Para ello, hicimos coronas con el dibujo del sol, del viento y una gota de agua. Con nuestras coronas realizaríamos todas las actividades que teníamos preparadas.
El primer turno fue para el sol. Observaron cómo el sol nos calentaba y, además, descubrieron que si abríamos bien las ventanas, no necesitábamos encender la luz. Trabajaron de esta manera el ahorro energético y las posibilidades de la energía solar.
La actividad que prepararon del viento fue la que más les gustó a los niños y a las niñas sin duda alguna. Disfrutaron mucho soplando un molino de viento. Observaron aquello que decía la seño de que el viento nos proporcionaba energía y podía mover las cosas. Así fue, soplaron y soplaron y rieron viendo cómo el molinillo daba vueltas y vueltas. Lo pasaron genial.
Por último lugar, conocieron la energía hidráulica. Previo a dar comienzo al proyecto, se había informado a las familias en qué consistía Voz Natura y se había puesto en conocimiento la necesidad de su colaboración. Este era uno de esos momentos en los que necesitábamos su ayuda haciéndoles partícipes de esta actividad.
Les entregamos una gota de agua que debían decorar en casa con materiales reciclados y traer de nuevo al cole. Algunos la decoraron con lana, otras con pajitas de cartón. Algunas con arandelas de latas y otras con papelitos. ¡No había una igual que otra! Se implicaron mucho y fue un éxito de participación.
Los niños y las niñas hicieron en clase con las seños algunos peces y un cangrejo muy simpático. Todo ello con material reciclado: utilizaron botellas, tapones, briks… Los decoraron con distintos elementos como goma eva, papel o gommets.
Tras conocer la importancia del agua para la supervivencia del planeta y los seres vivos, los niños y las niñas devolvieron a esos peces que habían creado al estanque, donde vivirían contentos.
Además, las seños crearon una noria hecha con una caja de bombones redonda, envases individuales pequeños y botellas de detergente. Pudimos observar qué pasaba cuando vertíamos agua en uno de los recipientes. La noria empezó a girar por sí misma con la energía del agua. ¡Nos quedamos asombrados ante este descubrimiento!
A modo de conclusión final, jugamos con la Tierra que giraba y se ponía contenta o triste dependiendo de las prácticas del ser humano. Las seños les explicaron que está en nuestras manos cuidar el planeta para que esté feliz, sano y vivo. Así que, lanzaban situaciones positivas o negativas para la Tierra y este se iba moviendo y nos mostraba su cara de felicidad o tristeza.
Por ejemplo, cuando reciclábamos, la Tierra estaba contenta. Sin embargo, cuando dejábamos las luces encendidas todo el día o tirábamos papeles al mar, el planeta se ponía extremadamente triste.
Ahora que ya conocemos diferentes prácticas para ayudar a la preservación del medio ambiente y dejar que la Tierra tome un respiro, solo necesitamos llevarlas a cabo día a día.
Porque, recordad una vez más, que en nuestras manos está salvar el planeta.
MATERIAL: Cartón, pinturas de colores, silicona, cúter, tijeras, bolsas de plástico de color azul y blancas, papel continúo marrón, goma eva, cartulinas de colores, pegamento, envases de plástico, briks, pajitas.
OBJETIVOS:
-Intentar que los niños aprendan y conozcan diferentes factores ambientales que les rodean, que aprendan a cuidarlos y respetarlos.
-Sensibilizar y concienciar sobre los problemas medioambientales.
-Fomentar actitudes respetuosas con el medio ambiente.
-Iniciar en el conocimiento de las energías renovables y su importancia.
-Reducir, reciclar y reutilizar materiales del entorno.
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